La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, aseguró que el gobierno garantizará que las personas indocumentadas tengan acceso a vacunas porque es “moralmente correcto y garantiza también la seguridad de las personas en el país”.
El Gobierno de Biden puso énfasis en la atención de la pandemia del coronavirus, que ha cobrado más de 400. 000 vidas en Norteamérica.
Biden, quien fue investido presidente el pasado 20 de enero, se puso como objetivo en sus primeros 100 días tener 100 millones de vacunaciones, cifra que luego subió a 150 millones.
El Gobierno anunció que comprará 200 millones de dosis adicionales de las dos vacunas contra el COVID-19 que han recibido autorización para uso de emergencia en el país, las de las farmacéuticas Pfizer y Moderna.